El último modelo en dar un salto hacia las tendencias más retro es el Beetle, compañero de aventuras de otro coche igualmente trendy como el Mini.
Nunca deja de sorprenderme hasta qué punto las tendencias influyen en los más distintos aparejos de la vida cotidiana. Este ejemplo, aplicado al mundo de la automoción, lo encontramos en el nuevo Beetle, el Escarabajo de toda la vida, para entendernos.
Me llamó mucho la atención su línea y diseño, tan retro, todo un gran acierto para los alemanes de Volkswagen que han sabido de nuevo sorprender con un modelo que lleva en el mercado nada más y nada menos que 66 años, concretamente, desde 1948.
Otro gran turismo con aires vintage de esta casa es el archifamoso T1, más conocido como la furgoneta hippy de los 60. Me encanta. Es una pena que apenas se pueda encontrar en las calles, ya que tan sólo se fabricó durante apenas 20 años, entre 1950 y finales de 1960.
Y no se puede concluir este apartado sin mencionar al carismático y british Mini , un pequeño gran turismo compañero de aventuras del Beetle, ambos de la misma generación. En este caso, los fabricantes han dado una vuelta de tuerca más con el modelo Countryman para convertir al dulce Mini en un aguerrido todoterreno que pasa del asfalto callejero a conquistar los ambientes rústicos.
Por Cárdigan
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